Sé que no somos las primeras en hacer este tipo de manicura, pero quería compartir con vosotras la técnica que me ha enseñado mi hermana. Así que... a vuestras uñas, listas, ¡ya!
En primer lugar, hay que preparar la uña. Parece de cajón, ¿verdad? Pero si no están bien limadas, cuidadas y pretratadas, por mucho que queramos hacer el resultado será un desastre. En nuestro caso, utilizamos un bloque para limar y pulir las uñas de Sephora, el exfoliante para manos de Sephora (¡nos encanta!), la base protectora y endurecedora de Mavala, y la loción de manos de CND Scentsations con la que nos obsequiaron en la Beauty Party.
Y después vino lo más difícil... ¡seleccionar qué colores utilizaríamos! Como queríamos probar con varias combinaciones, escogimos los siguientes tonos de Essie (de izquierda a derecha en la foto):
- Watermelon
- Cascade cool
- Go ginza
- Naughty Nautical
- Where´s my chaffeur?
- Butler please
Y, cómo no, el top coat secante de Essie, que es un invento maravilloso.
1. Pinta todas las uñas con la base protectora transparente.
2. Escoge el color de base y pinta todas las uñas. Normalmente es el más oscuro.
3. Con el pintauñas del segundo color, traza una raya perpendicular en sentido ascendente (en nuestro caso, es el color rosa chicle). No pasa nada si te sales, porque después lo podrás corregir con quitaesmaltes.
5. Repite el proceso del punto 3 con el primer color (es decir, el de base). Tiene que quedar una raya superpuesta que deje ver una línea del segundo color. Y sí, nosotras nos salimos bastante al hacerlo ;)
7. Como paso final, aplica el "top coat" secante, espera y elimina los restos de esmalte de los lados de la uña. Es importante hacerlo en este punto, para que si por error te metes en la uña no estropees tu trabajo, y como mucho quites un poco de "top coat".
¿A que queda bonito el resultado final?
* En las fotografías veis la manicura antes de haber acabado de quitar los restitos de los laterales. Teníamos que dejar secar la laca de uñas, y nos faltaba tiempo para acabar las fotos ;)
