Saved by Spanx! (literalmente, ¡salvada por Spanx!)

Es curioso cómo nos afecta a tod@s la operación bikini. Podemos estar felices en invierno con nuestros abrigos y hasta reconciliarnos con nuestros michelines en un alarde de generosidad navideña, pero cuando asoman los primeros rayos de sol una tremenda psicosis parece amenazar nuestra felicidad. ¿Tendremos un cuerpo estupendísimo para lucir en nuestras dos semanas de vacaciones, si es que las tenemos? ¿Estaremos divin@s en la piscina comunitaria y causaremos furor en nuestra comunidad de vecinos? El que no haya tenido nunca esos pensamientos, que tire la primera piedra...

Por eso, y porque últimamente he dedicado mucho espacio a la celulitis en el blog, hoy quiero hablaros de una solución para remodelar el cuerpo cuando vas vestida. Y aunque mi abuela llamaría de otra manera a tamaño invento, yo prefiero denominarlo como "ropa interior moldeadora" ya que, por suerte, desde la época del fajorrio-color-carne-anti-libido hemos avanzado muchísimo. ¿Adivináis de qué va el post de hoy? Sí, sí, habéis acertado: de la marca Spanx.

Spanx es una firma de ropa interior moldeadora que ha elevado a la categoría de arte el "recolocar" los centímetros que nos sobran (o que no están puestos exactamente como nos gustaría). Además de sus ya tradicionales pantaloncitos de talle alto In-Power Line Super Higher Power (que de un plumazo afinan cintura, reducen trasero y difuminan cartucheras y otras pesadillas veraniegas), tienen una amplia gama de ropa interior para todas las ocasiones: especiales para llevar bajo vestidos (a modo de enagua moldeadora), medias con efecto "tummy-tuck" (comúnmente conocidas como vientre plano), especiales para moldear el pecho, especiales para moldear todo menos el pecho... En cualquier caso, están especializados en mejorar las zonas problemáticas: vientre, trasero, caderas, cartucheras y pecho.

Y si desde que conocí la marca os he animado a utilizarla de todo corazón (podéis ver algunos de los posts aquí, aquí y aquí ), hoy tengo un motivo más: Spanx me ha evitado tirar una falda preciosa que compré de Dolores Promesas Earth y que no me cabía por un mísero centímetro.

Desde hace más de una década, Spanx ha sido una de las prendas favoritas de algunas celebrities y de muchas mujeres maravillosamente normales en todo el mundo. Tyra Banks admite utilizarlos. Es de sobra conocido que Beyoncé sólo se enfunda en sus tremendos modelitos si lleva todo bajo control con una prenda de la marca. Y una servidora, que gasta habitualmente una talla 36, también ha tenido que recurrir a la marca para domar unas curvas que deben salirse de la mente de los fabricantes de ropa.

Así que, si es tan conocida, ¿quién quiere gastar su tiempo y su dinero en dietas milagrosas que pueden ser malas para la salud si puede utilizar ropa interior inteligente? Yo, personalmente, prefiero Spanx a cualquier dieta extraña que sólo sirve para vender libros y productos de Avena.

Lo mejor es que la firma tiene también una línea para ir a la playa o la piscina con total confianza, e incluso ha sacado una colección especial para caballeros.

Así que no perdamos la cabeza: el secreto para estar bien por fuera y por dentro es comer bien (sano, variado y con todos los nutrientes necesarios), hacer ejercicio, disfrutar de la vida y reconciliarnos con el espejo. Además, algunas cremitas como Somatoline Cosmetic Noche 10, los anticelulíticos de Clarins y Thiomucase pueden ayudarnos a vencer la temida celulitis (a ninguna chica nos gusta tenerla). Y con uno de los truquitos de Spanx, tendremos asegurada una figura de infarto. Qué felicidad :)

Spanx se comercializa en España a través de la empresa Sandra´s Living (www.sandrasliving.com),. En su web podéis encontrar toda la info de Spanx.

Y vosotras, ¿tenéis algún truqui para entrar en ese vestido o falda de casi vuestra talla?