Personalmente me gustan mucho las versiones que aparecen de los perfumes insignia de las marcas; creo que es una forma muy divertida de descubrir las diferentes personalidades que tiene una misma inspiración olfativa, y es sorprendente cómo con unos pequeños cambios una fragancia puede adquirir una personalidad totalmente nueva.
- Como notas de salida, la mandarina, las hojas de violeta y el néctar de pera completan un bouquet cítrico y frutal muy apetecible.
- Las notas de fondo dan lugar a toques totalmente orientales: cashmeran, ámbar, vainilla y almizcle. Pura sensualidad y calidez con un punto especiado.
- Las notas de corazón (que son la que más me recuerdan a la familia Halloween, y hacen de enlace perfecto con sus antecesores) incluyen la orquídea, el jengibre, el jazmín Sambac y la lila. Todo un combo de flores exóticas que aportan una femineidad misteriosa.
Inés de la Riva, perfumista de IFF, nos explicó la fragancia durante la presentación, y nos estuvo explicando cómo el juego de notas creaba un aroma final muy especial. Las notas de salida son las primeras que se perciben, casi como una explosión chispeante. Después, las notas de fondo aportan el allure orientalista de la fragancia, y finalmente las de corazón sientan las bases del conjunto con acordes florales muy especiales.
Uno de los consejos que nos dio esta gran profesional fue el de pedir una muestra en la perfumería antes de adquirir una fragancia, y utilizarlo durante unos días para ver si ese aroma concuerda con tu personalidad. ¡Así se evitan los chascos!
Halloween Fleur está amadrinada por la modelo danesa Josephine Svenningsen. Fijaos en el precioso mantón de manila de su visual: ¡es una auténtica obra de arte! Y el packaging no puede ser más dulce: un precioso frasco de cristal con una delicada rosa en tono violeta empolvado, haciendo un guiño a la inocencia que transmite la fragancia.
Halloween Fleur ya está disponible en los puntos de venta habituales de la marca, con un precio recomendado de 54 euros/100 ml.
