Si sois asiduas a las últimas novedades cosméticas, seguro que conocéis muy bien el producto del que os quiero hablar hoy: las BB creams. Conocidas en Asia desde hace años y muy extendidas en países como Francia o Estados Unidos, sus siglas hacen referencia al concepto “Blemish Balm”, es decir, un bálsamo para las imperfecciones. ¿La buena noticia? Que por fin Garnier ha lanzado su primera BB Cream en España, ¡y yo estoy encantada con los resultados!
Lo curioso de las BB Creams es que surgieron como productos desarrollados por un dermatólogo alemán en la década de los 70. Con cualidades excepcionales para calmar rojeces y suaviczar la piel después de tratamientos dermatológicos medianamente agresivos, alcanzó su punto álgido cuando las celebs coreanas admitieron que era uno de sus secretos para tener una piel perfecta (junto con, claro está, sus extensivos e intensivos rituales de cuidado diario de la piel).
He de admitir que yo llevo algunos años usándolas (conocí las de la marca Erborian en Sephora, en París, y desde entonces no han abandonado mi neceser), pero una de las características de estos productos es 1.) que suelen ser caros y 2.) que suelen ser dificilísimos de encontrar. Así que entenderéis por qué estoy tan emocionada de que Garnier haya sacado su propia BB Cream a un precio más que apetecible (12.95 euros), y esta vez diseñada para la piel caucásica (las originales están pensadas para pieles asiáticas, y a veces noto que el tono es demasiado blanquecino para mi gusto).
Entonces, ¿qué es una BB Cream? Un producto todo-en-uno que sustituye a varios productos:
- Hidratante matutina
- Corrector
- Base de maquillaje
¿Y qué se consigue con la BB Cream de Garnier? Hidrata y nutre el cutis en un solo gesto, camufla las imperfecciones, consigue un efecto “piel de bebé” para un tacto suave y luminoso, y permite que el color del rostro sea uniforme.
Hasta aquí la teoría, pero… ¿y la práctica? He estado usando la BB Cream de Garnier durante dos semanas y he notado que la hidratación matutina era buena, la cobertura estupenda para ir a trabajar (ni mucho ni poco, un toquecito), la piel queda absolutamente suave y la sensación es más que confortable durante todo el día. Y oculta bien las pequeñas imperfecciones. ¿Mi recomendación? Si te gusta que los productos sean muy cubrientes, puedes matificar con polvos sueltos por encima. ¡Queda espectacular!
Para mí es, en pocas palabras, una excelente alternativa a la crema de día y un pequeño milagro para las que no tenemos ni tiempo ni ganas de maquillarnos por las mañanas. Aporta luminosidad, protección, hidratación y unifica el tono de la piel, y no se resiente en el bolsillo (me parece muy acertado que cueste 12.95 euros).
Y vosotras, ¿usáis BB Creams o sois asiduas a otros productos de belleza?