Desde hace mucho tiempo me cuesta relajarme, lo admito. El estrés laboral, los problemas cotidianos y esa sensación de que a veces Murphy y sus malditas leyes la tienen tomada conmigo me dejan agotada. Y sólo un baño caliente es capaz de quitarme las preocupaciones de la cabeza, aunque sea durante un ratito.
Pues bien, a raíz de la presentación del vestuario de la película “Ágora” tuve la oportunidad de conocer a Mónica Ceño, la creadora de The Lab Room, quien por cierto está nominada al premio Cosmopolitan Mujer Emprendedora del Año (¡recibe desde aquí nuestra enhorabuena, Mónica!). Pues bien, The Lab Room es un concepto totalmente nuevo, donde ingredientes botánicos de altísima calidad se dan la mano con las últimas tendencias en tratamientos corporales y faciales. Y, además, fueron los primeros en ofrecer en Madrid un “bar de cejas”, uno de sus servicios estrella, que realmente las esculpe para sacar lo mejor de tu mirada.
The Lab Room es una visita imprescindible. Un oasis en medio de la gran ciudad. Un remanso de paz al alcance de todos. De hecho, cuando salí del centro parecía que flotaba; la sensación de bienestar es la misma que se experimenta en los baños tradicionales árabes o hammam (que también os recomiendo probar al menos una vez en la vida).
Tuve la ocasión de probar uno de sus rituales faciales, Facial Deluxe The Lab Room, y he de confesar que conseguí un estado de relajación absoluto. Y mi piel, normalmente más seca que un desierto, salió fresca, sin tiranteces, resplandeciente... y muy hidratada. Vamos, que consiguieron encandilarme en menos de hora y media.
Además, las instalaciones del centro son una maravilla. Es pequeñito, pero cuidan cada detalle con mucho mimo, y tiene un puntito retro absolutamente encantador. Si nada más entrar en la tienda empiezas a encontrarte más relajad@ no lo dudes: es el efecto de los aceites esenciales que pululan libremente. Pero sin llegar a ser molestos ni cargantes.
Y por eso quiero compartir mi experiencia con vosotr@s. Recientemente tenían una oferta para este tratamiento, así que yo aprovecharía la oportunidad para conocerlo.
¿Y en qué consiste?
El facial Deluxe The Lab Room es un tratamiento realizado con la exclusiva línea The Lab Room Beauty Collection a base de extractos botánicos.
El tratamiento empieza con una limpieza con "Deluxe Facial Cleanser", una leche limpiadora y desmaquillante que nutre y limpia la piel, a la vez que relaja gracias a su aroma envolvente de rosas.
Sigue con el tónico facial "Botanical Skin Infusion" con aloe, rosa y agua de azahar que nutre y protege la piel previniendo las agresiones externas. También aporta luminosidad a la piel.
Después se aplica la mascarilla facial exfoliante "Facial Scrubbing Mask" de triple acción: hidratante, exfoliante y nutritiva. Y a continuación se aplica la mascarilla purificante de lavanda y bardana "Lavander Purifing Detox Mask" que minimiza los poros y absorbe las impurezas.
¿Lo mejor? Que después viene un masaje facial con el serum "Facial Radiance Serum", con rosa mosqueta, almendra, germen de trigo con aceites esenciales de enebro, ylang ylang, limón y lavanda. Después aplican una segunda mascarilla facial dependiendo del tipo de piel y realizan una reflexología podal. (Nota mental: creo que es aquí donde empecé a quedarme dormida).
Y por último se realiza un pequeño masaje con la crema hidratante "Botanical Face Cream", que mantiene la piel hidratada a la vez que repara y equilibra la epidermis.
En definitiva, un remanso de paz en medio del bullicioso Madrid. Un MUST con mayúsculas si tus jefes –o la ley de Murphy- parecen no dejarte en paz.
PD- Salí tan relajada que los efectos duraron unas dos semanas. ¡Dos semanas absolutamente zen!. Impagable. Os animo a probarlo.
¿Dónde?
Para evadirte del mundo, puedes visitar The Lab Room en MADRID:
Centro Campoamor: CAMPOAMOR 6, TEL. 917811411 / 914312198
Spa en el Hotel Miguel Ángel: MIGUEL ANGEL 29-31, TEL. 914520523
web: www.thelabroom.com
